Esta semana tuve de visita a Andrés, un gran amigo venezolano, aquí en los predios de mi apartamento. Con su visita ya van unas 700 personas que me han venido a visitar en los dos años y medio que llevo en Buenos Aires, si no se me escapa nadie. Por momentos en esta entrada habrá una sensación de que me estoy quejando de la gente que ha venido. Pero nada más lejos de la verdad. Agradezco todos los días haber podido conocer a su lado muchas cosas esta ciudad. Sin embaaaargo... Soy quejón por naturaleza. Así que aquí va una lista de cosas a tomar en cuenta si vienes a visitarme en el futuro.
El autobusito turístico de Buenos Aires que ahora
para en mi casa a buscar turistas después de la casa rosada
- Tendrás llave, un celular y una camita en una sala. Ah, y una toalla y sabanas limpias. Es como un hotel, pero lamentablemente no pagas nada. Lamentablemente para mí, tu debes estar bien contento por ahorrarte unos cobres.
- Habrá momentos en los que no puedo estar contigo merodeando por toda la ciudad. Sí, yo sé que no es lo ideal, pero yo tengo cosas que hacer acá, así que necesito que entiendas que habrán días en los que tendrás que caminar tu solo. Por ende, es importante que tus primeras dos jornadas a mi lado prestes atención a las indicaciones que te digo en cuanto a la ubicación del metro y las distintas líneas de colectivo que pasan por el edificio. Si no prestas atención pasarás de estar perdido en la belleza de la ciudad a estar perdido en la ciudad y punto. Me llamarás y te diré de lo más condescendiente: "ah, yo juraba que te había dicho como llegar...".
- La primera empanada que probó mi amiga Gaby cuando vino era bastante mala. Más nunca probó empanadas argentinas. Lo mismo pasó con Andrés y las facturas la semana pasada. La presión está sobre mis hombros y debo hacer lo posible porque cada cosa que pruebes sea lo mejor que la ciudad tiene para ofrecer. Pero ten paciencia. Una empanada desabrida no las representa a todas. Hay que besar muchos sapos antes de encontrar la empanada que te guste. O algo así...
- Yo sé que quieres hablar de Chávez. E incluso si no quieres, la experiencia me ha demostrado que no vas a poder evitarlo. Así que hazlo. Pero no te excedas. Supongo que estás aquí para distraerte un poco de aquello, ¿no? Bueno, entonces limita la cosa. O te propongo que trates de comprimirlo todo en un par de días en los que digas todo lo que te de la gana acerca de él y luego lo olvides por completo.
- Espero traigas unos buenos zapatos para caminar. Si algo se hace en esta ciudad es moverse a pie. Y conmigo más aún. Como siempre suelo decir, yo aprendí a caminar cuando era niño, pero lo he redescubierto en Buenos Aires. Así que prepárate porque tiendo a pensar que todo está a una distancia peatonal prudencial, incluso si queda a 45 cuadras
- Aquí puedes caminar de noche con tranquilidad. Relájate. Pero no demasiado. No estás en Suiza tampoco. No olvides esto. Será común regresar a las 3 de la mañana así sea de haber ido a tomar cervecitas y comer empanadas. Empanadas buenas, te lo prometo.
- No olvides traerme mi harina PAN y mi Nestea. Ese es el peaje por quedarte en mi morada. Y bueno, que te conozca de antes y que me caigas bien. No es que ahora cualquier persona que traiga Nestea y harina tiene pase libre a mi casa. Ojo con eso.
Otra forma de pagar el peaje
- Por el bien de que te ahorres aún más reales (¿te mencioné que ya no vas a pagar estadía?) no tendrás que pagar ningún paquete turístico en la ciudad. He ido tantas veces a Caminito, al cementerio de la Recoleta y todos los demás sitios que ya puedo contarte las historias como si las hubiese vivido en carne propia. Lo de la Recoleta incluso me impresiona a mi mismo. Me sé la ubicación de todas las tumbas del tour de memoria e incluso le he incorporado algunas de mis tumbas favoritas que he descubierto yo solito.
- Por último, es recomendable que leas este blog con regularidad. Algún día se convertirá en la guía más completa para venezolanos y demás extranjeros en Buenos Aires. Y además me vas a ahorrar mucho tiempo de tener que explicarte cosas que ya aquí están explicadas con bastante claridad. Ya he pescado a unos cuantos que dicen haberlo leído y luego me hacen preguntas como "¿qué es eso del mercado central?" o "¿cómo es eso que aquí los hombres saludan de beso".
Bueno, ya con todo esto aclarado queda decirte que debes informarme que vienes por lo menos unas tres semanas antes para ver si tengo disponibilidad en esos días. ¡Luego de que te ve el visto bueno serás completamente bienvenido! Y el Nestea que sea de limón.
Pedro, el infiltrado
Como lectora frecuente del blog y visitante de Pedro, puedo añadir un par de cositas desde la perspectiva de quien visita. Tal como dijo Pedro, al llegar a su casa te recibe con el kit de bienvenida, que incluye los siguiente: tour de la casa, funcionamiento básico de las cosas, llaves y celular. Si eres aventurero, te entregan tu copia de la guía T, que es la Biblia para moverse en transporte público.
ResponderEliminarTal como dice Pedro, los primeros días te enseñará como llegar a la estación de Subte mas cercana, cuales líneas de colectivo tomar para ir para X o Y sitio, etc, pero lo que él no sabe es que a uno todo le parece igual, y el proceso de aprendizaje toma mas tiempo del que él cree. Mi recomendación (así fue como yo hice) anoten lo que él les diga y no sientan pena de sacar su cuadernito a la hora de recordar que vía tomar para llegar a cualquier lugar.
Otra cosa importante que deben saber es que Pedro es muy dormilón, y quién lo culpa? Yo soy dormilona también, pero no cuando estoy de vacaciones. Así que si quieren aprovechar los días, les tocará realizar actividades solos en las mañanas...
Ah, muy importante. Pedro, que ya hace varios años vive fuera de Venezuela, no entiende la necesidad compulsiva que tenemos todos los venezolanos de comprar todo lo que se nos atraviese cuando vamos a otro país. Así que no esperen que los acompañe en esta importante actividad. Lo que si pueden esperar son sus burlas y quejas cuando llegues a la casa tras un largo día de compras con 25 paquetes, y el típico discurso:"Mas bolsas? Ya no has comprado suficiente? Cuantos pares de zapatos necesita Gugu'? (esa última es personalizada jejeje)"
Lo mejor que puede pasarles es que Vicky, que tiene mucha mas paciencia que Pedro, los acompañe, aconseje y ayude en la planificación de sus actividades.
P.D. Pedro, mi querido, me acompañó a muchos sitios cuando fui, pero me dejó sola en el mas inapropiado: La visita obligada a Caminito. Lo peor no es que me no me acompañara, sino que además antes de irme me dio unas 100 recomendaciones de que NO HACER en Caminito, que además de ser una zona conocida como pintoresca, también es conocida como muy peligrosa.
Eliana, la visitante
Algunas mananas cuando despierto y me encuentro con la noticia de que se ha publicado una nueva entrada en este blog, se que mi día sera bueno, lo comienzo con risas y risas, yo no puedo explicar lo identificada que me siento con lo que Pedro dice, soy venezolana y tengo el mismo tiempo que él en Argentina, pero por dios cada cosa de mi vida en esta ciudad Pedro la ha narrado de una manera tan graciosa que ahora veo todo mas cómico.
ResponderEliminarGran blogazo, felicidades Pedro!!
Genial!
ResponderEliminarLo puedo usar de guía para mis visitantes?
Hola Pedro, yo tengo 1 mes viviendo en BsAs y ya tengo un montón de gente que quiere venir, así que tu guía creo que la implementaré con mis visitantes (tranquilo, te daré los créditos); pero yo le agregaría que además de harina y té, traigan por amor a todos los santos: QUESOOOO!, increible!, en este país donde hay tanta variedad de lacteos y no haya un quesito ni parecido al nuestro!...Eso será arancel vital para quedarse en mi casa, jajajaja...Abrazos!
ResponderEliminarQue bueno tu blog de verdad, me he sientido identificada más de una vez, esto de las visitas es un tema ( ya hablo en argento y todo jaja) todos quieren venir d evacaciones y nadie quiere pagar posada chico, creen que uno monto un hotel aqui, yo prefiero no hacerme cargo de eso, pues la gente viene de vacaciones y uno no lo está , buenisimos tus comentarios, tu redacción, saludos
ResponderEliminarRebe
Entiendo perfectamente lo que dices, es una responsabilidad muy grande recibir a alguien, pero también hace mucho bien para ver las cosas en perspectiva, aprendes más los cambios vivido y cómo son las cosas en cada lugar. Saludos
ResponderEliminar